La vida contemplativa causa sorpresa gracias a la película «Libres»

La película «Libres», inédita producción que ha penetrado en los muros de doce monasterios, está cambiando la percepción de la sociedad sobre el valor de la vida contemplativa para la sociedad.

La gran cantidad de artículos publicados por la prensa, tanto generalista como especializada en cine, ha servido para constatar que el largometraje ha tocado corazones de creyentes y quizá incluso más de no creyentes.

Rosamaría Aguilar, en Contraste,  página web educativa, constata: «este documental es de una exquisita belleza audiovisual. Se ha cuidado y mimado cada imagen, las tomas en cada convento, en cada conversación, en cada paisaje, entrelazadas con una música que trasporta, sin casi quererlo, a un mundo interior que interpela al espectador a hacerse preguntas».

«Está dividido en tres áreas interconectadas: el Camino, la Verdad y la Vida; tal y como se define Jesucristo a sí mismo en el evangelio. En cada parte, diferentes monjes y monjas explican cómo fueron llamados por Dios, cómo viven y trabajan en el monasterio y sus relaciones con el exterior. Cada entrevista está tratada con gran delicadeza, dejando espacio a que los protagonistas abran públicamente su corazón. Algo absolutamente inédito».

«No son un grupo de gente impecable, sino de carne y hueso, como cualquier humano que, tocados por Dios, son los nuevos Agustines, Pablos y Marías Magdalenas», añade.

«A lo largo del profundo film te vas encariñando con los personajes y sorprendiendo de sus vidas antes de entrar en el monasterio y después  – concluye el artículo de crítica de Rosamaria Aguilar –. Está destinado a un público no solo que quiera conocer la vida de los monasterios por curiosidad sino a quien quiera plantearse algo más en el camino de su vida personal. No dejará indiferente.

Juana Samanes, en El Diario de Burgos, constata que «la fuerza de este film radica en los testimonios de monjes y monjas que nunca son rotulados con su nombre, que hablan de temas que a todos nos preocupan: la vocación, la felicidad, el sufrimiento, la vida y la muerte».

«La cámara se introduce en los espacios donde oran, donde realizan sus trabajos (muchos de ellos en las faenas de la tierra), donde comen etc. A algunos espectadores les asombrará que algunos son personas jóvenes que, como dice uno de ellos, "no es una huida del mundo sino un ir hacia Dios"».

«Como se comprueba por sus declaraciones, llama la atención que, aunque todas las órdenes son de vida contemplativa, esos religiosos ven con más clarividencia, y describen con más tino, lo que ocurre en la sociedad que los que vivimos fuera de esas paredes», añade la crítica cinematográfica.

«Primera producción de Bosco Films y Variopinto Producciones, asombra lo bien que se desliza su desarrollo gracias al carisma de algunos de los entrevistados y sus testimonios, algunos asombrosos, que nos hablan de conversiones tras haber tenido vidas rozando el límite, como uno de los monjes que antes de tomar hábitos realizaba prácticas esotéricas o demoniacas, según confiesa, u otro procedente del mundo artístico que eligió los hábitos tras lograr el éxito profesional».

«Quizás uno de los apartados más interesantes es cuando declaran la dificultad de comprender el sufrimiento humano si no se le da su sentido y destilan paz cuando hablan de la muerte que "es parte de la vida, el último capítulo».

«La radiografía que hacen del mundo actual tampoco tiene desperdicio ‘vivimos acelerados, la gente tiene miedo a la muerte, al dolor, y hay una angustia tremenda’. De ahí que hablen de la importancia del silencio espiritual para encontrar las respuestas adecuadas al sentido de la vida. O, como dice una monja anciana, «Tratar de florecer donde Dios me ha plantado».

«Lánzate a lo profundo», es el título escogido por CinemaNet, página de crítica cinematográfica, para reseñar «Libres»,  «un viaje al interior del hombre, al hondón del alma, morada de Dios, donde se alcanza la plenitud personal y la auténtica libertad. No se trata de un reportaje sobre los monasterios de España, sino de una interesantísima película documental sobre el ser humano que levanta su vista y su vida hacia lo alto. Duc in altum, ‘lánzate a lo profundo».

El artículo de José Beltrán, en La Razón advierte ya en el título: «Spoiler: se puede ser feliz en clausura». Describe así la película: «una clausura quebrantada con 20 horas de grabación que han acabado condensadas en poco más de cien minutos que muestran cómo viven unos hombres y mujeres que han decidido desmarcarse lo mismo de los atascos que del imperativo de Whatsapp y de la dictadura del consumo».

«Dejarse atrapar minuto a minuto por el ritmo de ‘Libres’ permite redescubrir el valor del silencio, un pilar del monacato». La película logra «hacer audible cada respiración de la oración».

En conclusión, el reconocido experto en cine Peio Sánchez, concluye en URC, «si el referente, ya clásico, de la vida de clausura en el cine fue ‘El gran silencio’ (2005) de Philip Gröning, estamos ante una obra que podría titularse ‘La Palabra tras el gran silencio’. Una obra que, si todo va bien, se puede convertir en un nuevo clásico».

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