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Aunque no es la primera vez que hace saber su intención de viajar a Argentina, el papa Francisco ratificó públicamente que su idea es concretar el ansiado viaje a su país natal en 2024.
Lo hizo durante un encuentro de la Fundación Pontificia Scholas Ocurrentes, que cumplió diez años como plataforma global, durante una conexión virtual con jóvenes de distintos países, entre ellos Buenos Aires. «La idea es el año que viene, vamos a ver si se puede», respondió ante una pregunta sobre un posible viaje.
Ya el Papa lo había deslizado en diálogos y entrevistas publicadas por distintos medios de comunicación. Lo había insinuado en diálogo con Daniel Hadad en una entrevista publicada por Infobae, y el periodista Joaquín Morales Solá, quien suele publicar conversaciones con él aunque sin el formato de entrevista.
Pero hasta ahora no había registro grabado tan claro de esta voluntad. Además, según el periodista de Clarín Sergio Rubín, en la Santa Sede le confirmaron que se está empezando a trabajar en el tema.
¿Por qué 2024?
La oportunidad de un viaje en 2024 tiene que ver con que no será un año electoral en el país sudamericano, circunstancia que se da cada 4 con elecciones generales, y cada 2 con parlamentarias e intermedias varias. En otras ocasiones el viaje no pudo concretarse por la incompatibilidad de agenda entre los países a visitar, por ejemplo Chile, los meses de verano en la región, e incluso la pandemia. El Papa mismo había expresado públicamente su deseo de concretar viajes previo a esas circunstancias.
Anunciar la voluntad de viajar a esta altura del año permite, además, que su decisión no se vincule a ningún perfil político que se perfile para ganar las elecciones de este año.
Un viaje de esta naturaleza sería lógico, como están publicando los distintos medios de comunicación que se refieren al tema, involucre Uruguay y probablemente el sur de Brasil.
De Sudamérica el Papa, primer pontífice en haber nacido en Sudamérica e incluso América, ya visitó Brasil, Chile, Paraguay, Bolivia, Ecuador, Colombia y Perú. Si concreta este viaje, solo le quedaría de los Venezuela, donde las circunstancias políticas complican un viaje de esta naturaleza, Guyana, Surinam y Trinidad Tobago, además de la Guayana Francesa.
Scholas y una nueva sede
La referencia fue escueta, porque si bien el acto conectaba con Buenos Aires donde se bendijo la nueva sede del Ciclo Básico Común de la Universidad de Buenos Aires que funciona en la comunidad de Scholas del Barrio Mugica, uno de los más vulnerables de la ciudad, había invitados conectados desde otros países en los que la fundación tiene presencia.
Es que nacida en Buenos Aires durante los años de la crisis de inicio de siglo, con la llegada de Francisco al Pontificado Scholas Ocurrentes expandió su obra de promoción e inclusión desde la educación a distintos países.
En lo que es la posibilidad que Scholas ofrece en esta sede, el bien alcanzado se mide por ejemplo en la cantidad de jóvenes que ingresan a sus estudios universitarios en su barrio. Cuando hace poco menos de dos años ingresaron 50, ya este año hay 240 anotados.
La aspiración universitaria en muchos casos tiene como barreras en los barrios más vulnerables no tan solo la concreción de los estudios secundarios, sino también las necesidades laborales, económicas, y también de distancia y movilidad, y aún con opciones cerca, las barreras emocionales y el contexto de apoyo que les permita dar exitosamente esos primeros pasos.
Este ciclo de ingreso en el Barrio Mugica, anteriormente conocido como Villa 31, permite un trabajo más personalizado con quienes se animan a aspirar a un título universitario.
