Aunque había cancelado sus citas del sábado debido a una "ligera gripe", el Papa Francisco se asomó a la ventana del Palacio Apostólico para recitar el Ángelus del 25 de febrero de 2024. En su catequesis, invitó a los cristianos a "no alejarse nunca de la luz de Jesús".
Como cada domingo a mediodía, el Papa compareció ante miles de fieles congregados en la plaza de San Pedro bajo un sol radiante. El Pontífice, de 87 años, que llevaba una semana sin aparecer en público debido a su retiro espiritual de Cuaresma hasta el viernes, no mostró signos inusuales de fatiga. El sábado tenía previsto reunirse con los diáconos de su diócesis de Roma. Pero "debido a una ligera gripe" y "por precaución", el Papa había cancelado sus audiencias, según la Oficina de Prensa de la Santa Sede.
De pie, pronunció una breve catequesis sobre el Evangelio del día, que presenta la "transfiguración" de Cristo, el episodio durante el cual Jesús se aparece a sus discípulos Pedro, Santiago y Juan "en toda su luz". De esta luz, explicó el Papa, "los discípulos no deben apartar nunca más la mirada, especialmente en los momentos de prueba".
Aconsejando a los cristianos que tengan "siempre ante los ojos el rostro luminoso de Cristo", el jefe de la Iglesia católica les invitó también a ver "la luz de Dios" en "cada hermano y hermana".
El Buen propósito para prepararse a la Pascua:
En este tiempo de Cuaresma para los católicos, estos cuarenta días de preparación para celebrar la Pascua, el Papa Francisco propuso un "buen propósito":
Cultivar los ojos abiertos, ser 'buscadores de luz', buscadores de la luz de Jesús en la oración y en las personas".