"Lo que he permitido no ha sido bendecir la unión", dice el Papa Francisco, interrogado sobre el significado de la reciente declaración doctrinal Fiducia Supplicans en una entrevista con la cadena estadounidense CBS, emitida la noche del 19 de mayo de 2024, pero de la que ya se habían difundido algunos extractos el 24 de abril. La entrevista con la periodista Norah O'Donnell fue grabada el mismo día en la Casa de Santa Marta, en vísperas de la Jornada Mundial de la Infancia, que se celebrará en Roma los días 25 y 26 de mayo.
Respondiendo a una pregunta de la periodista sobre la autorización dada a los sacerdotes católicos para "bendecir a las parejas del mismo sexo" en la declaración doctrinal Fiducia Supplicans, publicada el pasado 18 de diciembre, el Papa Francisco aclaró su posición.
"No, lo que permití no fue bendecir la unión", explica el jefe de la Iglesia católica. "Eso no se puede hacer porque es el sacramento. Yo no puedo hacerlo. El Señor lo hizo así. Pero sí, bendecir a cada uno", porque "la bendición es para todos, para todos", insiste Francisco.
"Bendecir una unión homosexual va contra la ley, la ley natural, la ley de la Iglesia", dice el Papa. "Pero, ¿por qué no bendecir a cada persona? La bendición es para todos. Algunos se han escandalizado por esto. Pero, ¿por qué? Para todos, todos", insiste Francisco, recordando que la homosexualidad es "un hecho humano" y no debe considerarse un delito.
El Papa rechazó las críticas de los obispos conservadores, sobre todo en Estados Unidos, calificando de "suicida" la actitud del conservador "que se aferra y no quiere mirar más allá". "Una cosa es tener en cuenta la tradición, las situaciones de ayer, y otra muy distinta encerrarse en un cuadrado dogmático", advierte.
En la entrevista, el Papa mantiene la línea tradicional de la Iglesia al reiterar su oposición a la maternidad subrogada, que "se ha convertido en un comercio muy duro", lamenta. Las mujeres que no pueden tener hijos deben "consultar claramente la situación" desde un punto de vista médico y moral, explica Francisco, subrayando que "la otra esperanza es la adopción".
Denuncia la indiferencia ante la situación de los migrantes
"La migración es algo que hace crecer a un país", explica Francisco, permitiéndose un poco de humor hacia la periodista que acaba de hablarle de sus raíces norirlandesas. "Se dice que ustedes los irlandeses emigraron y trajeron el whisky, y que los italianos emigraron y trajeron la mafia", dijo el Papa argentino, subrayando que "los emigrantes a veces sufren mucho".
Preguntado por la crisis migratoria en la frontera entre México y Estados Unidos, el Papa explicó que cerrar las fronteras es "una locura". Pidió que se estudie "con humanidad" el caso de cada migrante, incluso con vistas a su deportación. En general, y también por lo que respecta a Europa, al Papa le entristece ver la "indiferencia" de muchas personas que "se lavan las manos" como "Poncio Pilatos" ante el desamparo de los migrantes.
Además de los llamamientos a detener la guerra en Ucrania y en la Franja de Gaza, ya difundidos, el Papa, preguntado por los disturbios en las universidades estadounidenses, denunció el antisemitismo como una "ideología perversa". "Podemos criticar a tal o cual gobierno, al gobierno israelí, al gobierno palestino. Se puede criticar lo que se quiera", pero no se puede ser "ni antipalestino ni antisemita", afirmó.