La leyenda cuenta que san Patricio las expulsó del país… pero ¡están volviendo!
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Un joven de Dublín de unos 22 años fue mordido por una serpiente a finales de febrero. La noticia no tendría la menor trascendencia en otros países, pero en Irlanda se ha convertido en un acontecimiento sensacional y sin precedentes.
Según informa el Irish Post, el joven fue mordido por su mascota, una víbora potencialmente mortal originaria de Marruecos y otros países del Norte de África. Tan extraordinario suceso ha obligado a las autoridades sanitarias a buscar el antídoto fuera del país.
Y la razón es que… en Irlanda no había serpientes (hasta ahora). Cuenta la tradición que fue su santo patrono y evangelizador, san Patricio, quien las expulsó del país, como símbolo de la expulsión de los demonios paganos.
Según la leyenda, san Patricio ayunó durante cuarenta días en lo alto de un monte – hoy conocido como Coragh Patrick, el lugar más santo de Irlanda y meta de peregrinación – siendo molestado continuamente por las serpientes, símbolo de las tentaciones malignas.
Así que, acabado el ayuno, el santo reunió a todos los ofidios del país y les ordenó que se arrojaran al mar desde lo alto de un acantilado.
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Más allá de la leyenda, según los científicos, las razones por las que en Irlanda no han prosperado las serpientes pueden ser de tipo climático: cuando las serpientes se difundieron por la superficie de la tierra, Inglaterra e Irlanda eran demasiado gélidas, y su posición geográfica las ha preservado posteriormente.
Actualmente, la realidad es que sí existen serpientes en Irlanda: debido a la globalización, igual que en otros países, existen coleccionistas de animales exóticos y cada vez es más habitual encontrar ofidios en jaulas como animales de compañía.
Pero hasta ahora, no habían dado “problemas” a los humanos. Una serpiente venenosa ha mordido a un hombre en Irlanda, y además pocos días antes del St. Patrick’s Day… ¿será este un signo de los tiempos?