Ir a misa puede ser un poco abrumador para los padres, especialmente para aquellos con hijos pequeños. Después de todo, en un lugar sagrado donde la gente va a tener un momento silencioso de oración y reflexión, el comportamiento menos perfecto de los niños puede parecer magnificado.
Pero es importante recordar que cuando Dios nos da la bienvenida a su casa Él, también, es padre, ¡y además tiene experiencia! Está más feliz de ver a mamás y papás y algunas veces a su ruidosa pandilla, en lugar de que se mantengan alejados.
Sin embargo, si necesitas seguridad, o formas de hacer que la misa sea lo más significativa posible cuando tienes niños, haz click en la galería a continuación para obtener algunas ideas.