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En Appledore, Devon, un grupo de 100 tejedores se unieron para levantar este hermoso árbol de Navidad, que adorna el exterior de la iglesia de St. Mary.
El árbol tiene una altura de casi 5 metros y está formado por la asombrosa cantidad de 1.000 cuadrados coloridos de 20 centímetros de largo, que los hábiles voluntarios han tardado alrededor de seis meses en ensamblar al completo.
Este esfuerzo extraordinario se inspiró en un árbol semejante de un grupo de Nueva Zelanda, que lo construyó en un intento por unir a su comunidad después de que la Covid-19 causara estragos en las celebraciones navideñas del año anterior.
"Con las Navidades del año pasado canceladas en su mayor parte y la incertidumbre sobre la Navidad de este año, pensamos que era una excelente forma de involucrar a todo el pueblo como comunidad a pesar de la Covid-19 durante el verano, cuando el pueblo está lleno de turistas", compartió un portavoz del proyecto con la BBC.
Sin embargo, el árbol es sólo una parte de las decoraciones de esta iglesia. Junto al árbol, podemos encontrar también una chimenea tejida y un mullido sillón con un gato blanco y negro.
El proyecto, dirigido por Jennie e Ian Lamb, implicó a todos los habitantes del pueblo, que usaron sus habilidades para tejer cada uno de los cuadrados y aunaron esfuerzos para ensamblar el árbol sobre su estructura de metal. Fueron ellos también quienes proporcionaron la mayoría de materiales para completar las decoraciones.
Si bien este árbol tejido ha traído indudablemente un espíritu festivo y de comunidad a Appledore, sería maravilloso ver si su propia comunidad podría inspirarse en este proyecto para crear una escena de la Natividad tejida; imagínese, ¡usted mismo podría tejer una preciosa manta para envolver al Niño Jesús!