Una obra de misericordia es visitar a los abuelos y a los ancianos abandonados, enfermos o discapacitados. El Papa autorizó al respecto un decreto de la Penitenciaría Apostólica con ocasión de la II Jornada Mundial de los Abuelos y de los Ancianos.
La Iglesia celebra la Jornada el próximo 24 de julio y busca aumentar la fe de los fieles; así como promover las obras de caridad a favor de los "hermanos mayores".
El decreto informa que se concederán indulgencias a los fieles que dediquen un tiempo "adecuado a la visita, presencial o virtual" a "los hermanos mayores necesitados o en dificultades".
Los tesoros celestiales de la Iglesia
La Penitenciaría Apostólica "concede benévolamente los tesoros celestiales de la Iglesia la Indulgencia Plenaria en las condiciones habituales (Confesión sacramental; Comunión eucarística y oración según las intenciones del Sumo Pontífice) a los abuelos, a los ancianos y a todos los fieles; a aquellos que, movidos por un verdadero espíritu de penitencia y de caridad, participen el 24 de julio de 2022".
La Misa del Papa
El Papa presidirá el 24 de julio una misa en la Basílica del Vaticano. Así la Indulgencia Plenaria es valida para “las diversas funciones que se llevarán a cabo en todo el mundo, una Indulgencia que podrá aplicarse también como sufragio a las almas del Purgatorio”.
“La Indulgencia Plenaria podrá concederse también, previo desprendimiento de cualquier pecado y con la intención de cumplir cuanto antes las tres condiciones habituales; a los ancianos enfermos y a todos aquellos que, no pudiendo salir de sus casas por un motivo grave, se unan espiritualmente a los sagrados servicios de la Jornada Mundial”.
Entretanto, la Indulgencia es válida “ofreciendo a Dios Misericordioso sus oraciones, dolores y sufrimientos de su vida; especialmente mientras se difunden por los medios de comunicación las palabras del Sumo Pontífice y las diversas celebraciones”.
Sacerdotes prontos a oír
La Penitenciaría pidió a “los sacerdotes, dotados de las facultades apropiadas para oír confesiones, que se pongan a disposición con espíritu dispuesto y generoso para la celebración del Sacramento de la Penitencia”.
La Penitenciaría Apostólica ha acogido la petición presentada por el cardenal Kevin Joseph Farrell, Prefecto del Dicasterio para los Laicos la Familia y la Vida; con motivo de la II Jornada Mundial de los Abuelos y los Ancianos, ya instituida por el Sumo Pontífice el cuarto domingo de julio.
Así firman el decreto en Roma, el 30 de mayo de 2022, el cardenal Piacenza, penitenciario Mayor y monseñor Krzysztof Nykiel, regente.