Este 2023 se cumplen 15 años de la llegada a la Basílica de Guadalupe en México de la imagen en relieve –o también llamada Virgen de los invidentes– hecha con el objetivo de que nadie se quede sin apreciar un poco de lo que fue la plasmación de la Virgen en la tilma de San Juan Diego, hace casi 500 años.
Esta pieza fue esculpida en 2008 por el artista italiano Franco Faranda y se elaboró en la ciudad de Faenza (Italia) en 2009. El costo de su producción superó los 20 mil euros (alrededor de 22 mil dólares).
«Es una pieza que ayuda a personas débiles visuales o que carecen de la vista, y que resalta los elementos más impregnantes», precisa Nidia Rodríguez, encargada del Museo de la Basílica de Guadalupe.
El Códice Guadalupano, en Braille
- La imagen es de color blanco
- Está elaborada con fibra de nylon de alta resistencia, lo cual facilita su limpieza
- Mide 1.20 metros
- Se pueden tocar y apreciar todos sus detalles
Al significado se le conoce como «Códice Guadalupano»: su sonrisa, la presencia del Hijo de Dios en su vientre abultado, enredado con un cinto que es símbolo de maternidad entre los pueblos indígenas.
La juventud de su rostro, que evoca a una mujer entre los 18 y 20 años; los rayos de sol, las 46 estrellas de su manto, que representan el firmamento que brillaba sobre el Valle de México al momento de la aparición; así como la flor de cuatro pétalos situada en el centro de su túnica, que dentro de los símbolos náhuatl hace referencia a la presencia de Dios.
Además de poderse tocar, se ofrece un texto en Braille que explica su historia y simbolismos. Esta imagen puede encontrarse en un espacio sencillo a un costado de la puerta 2 de la Nueva Basílica, cerca de los confesionarios.
«Pude sentir a la Virgen»
Jesús Monroy, un joven con discapacidad visual que tuvo la oportunidad de asistir a la Basílica de Guadalupe, compartió con Aleteia su emoción al conocer, a través de sus manos, dicha imagen.
«Yo siempre quise ir a verla. La primera vez que asistí a la Basílica no pude, pero fui en una segunda ocasión y preguntamos por la imagen. Al llegar a ella pude sentirla y comprobar que es muy bella, porque se siente todo. Es como si la tuvieras enfrente, con un realismo total, muy detallado, y de tamaño real. Y es una experiencia muy bonita».
Solo dos imágenes táctiles en el mundo
La imagen es copia fiel de la tilma original de San Juan Diego, cuyos detalles fueron obtenidos por el artista a través de fotografías en alta resolución.
Se trata de una pieza única, que fue bendecida por el Papa Benedicto XVI en la Basílica de San Pedro y tiene por objetivo impulsar la inclusión social de aquellas personas que visitan el lugar.
Actualmente, en Latinoamérica, es la única pieza táctil creada para personas con discapacidad visual y la segunda en todo el mundo junto a la Virgen de la Pera, una pintura creada en 1347 por el artista italiano Paolo Veneziano.