El Papa Francisco ha rendido homenaje a Asia Bibi, la cristiana paquistaní que pasó casi 9 años en prisión por blasfemia contra el islam antes de ser absuelta en 2019. "No hay época que no haya tenido mártires, hasta nuestros días", ha insistido durante una audiencia con los participantes en un simposio sobre la santidad el 16 de noviembre de 2023.
"Pensemos en un caso de vida cristiana vivida en continuo martirio", dijo el Papa sobre la madre de familia condenada a muerte en 2010 y finalmente liberada por la justicia pakistaní. "Casi 9 años de testimonio cristiano", insistió el Pontífice argentino, que recibió a su familia en 2018 en el Vaticano.
En vísperas de su 40 cumpleaños, Asia Bibi, una trabajadora agrícola de la región del Punjab, fue acusada en 2009 por mujeres musulmanas de haber profanado un pozo. Tras un maratón jurídico y una movilización mediática y política internacional -Benedicto XVI y luego el Papa Francisco, en particular, se conmovieron por su caso-, la paquistaní fue finalmente liberada de su prisión en Multan en noviembre de 2018. Después se refugió en Canadá.
"Tantos años hasta que los jueces la declararon inocente", dijo el Papa Francisco, contando cómo la hija de Asia Bibi le había llevado la Eucaristía en la cárcel.
"Es una mujer que sigue viviendo, y hay muchas, muchas como ella, que dan testimonio de fe y caridad", dijo el Papa a los participantes en el coloquio promovido por el Dicasterio para las Causas de los Santos y titulado "La dimensión comunitaria de la santidad".
Tras la liberación de Asia Bibi, se hicieron planes para reunirse con el Papa Francisco. "Al final, ella no quiso. Porque va en contra de su deseo de volver a Pakistán", declaró a La Croix en 2020 el editor del libro ¡Enfin Libre! escrito por Asia Bibi y la periodista Anne-Isabelle Tollet (Ediciones du Rocher).
En su discurso de esta mañana, el Papa también mencionó la inclusión en el Martirologio Romano de los 21 mártires cristianos, entre ellos 20 coptos ortodoxos, asesinados por Daech en Libia en 2015. Esta histórica iniciativa ecuménica fue anunciada el pasado mes de mayo. Se trata de los primeros santos reconocidos por las Iglesias católica y copta desde la ruptura del siglo V. "Murieron diciendo: 'Jesús, Jesús', en la playa", recordó el Papa Francisco.