Silvia Correale, postuladora de la causa de canonización de Mama Antula, la describió como "una madre espiritual de la Patria", la mujer que formó a más de 70 mil personas en los Ejercicios Espirituales, entre ellos los intelectuales argentinos que llevarían al país a la independencia pocos años después.
En la homilía de la Misa de canonización, celebrada ante miles de fieles congregados en la Basílica de San Pedro, el Papa Francisco explicó que Mama Antula fue una "viajera del Espíritu". "Recorrió miles de kilómetros a pie, a través de desiertos y caminos peligrosos, para llevar a Dios a los demás", convirtiéndose así en "un modelo de fervor y audacia apostólica", explicó el Papa Francisco, que había relanzado personalmente el examen de su causa de beatificación cuando era arzobispo de Buenos Aires.
"Cuando los jesuitas fueron expulsados, el Espíritu encendió en ella una llama misionera basada en la confianza en la Providencia y en la perseverancia", añadió Francisco.
"Nos da una gran alegría tener a nuestra primera santa argentina", dijo Ernestina Maria Dalla Corte, una periodista ítalo-argentina de Belluno, en el noreste de Italia, que se alegró mucho de encontrarse en el Vaticano, a pocos metros de "su" Papa. "Mama Antula era una mujer de una época antigua pero moderna, que vivió muchas de las mismas luchas que nosotros seguimos viviendo hoy", comenta. Señala que la nueva santa fue "una mujer muy adelantada a su tiempo", y especialmente atenta a la situación de los pobres, las mujeres y los niños.
Una oportunidad para acercar a Argentina e Italia
El Papa argentino recordó también que Mama Antula popularizó la devoción a san José y a san Cayetano de Thiène, cuya imagen se ha difundido "en los hogares, en los barrios, en los transportes, en los comercios, en las fábricas y en los corazones, para ofrecer una vida digna a través del trabajo, la justicia y el pan de cada día en la mesa de los pobres", subrayó. Ernestina, que nació en Argentina en el seno de una familia originaria de Italia antes de regresar a este país, también se mostró encantada con este aspecto, y para ella esta devoción a San Cayetano contribuye al vínculo entre los dos países.
Denise, por su parte, ha venido desde la provincia de Jujuy, en el noroeste de Argentina, con un grupo de peregrinos que ondeaban orgullosos la bandera albiceleste. "Es importante para nosotros poder venerar a una santa argentina, que nos anima a estar cerca de los demás en nuestra vida cotidiana. Es un ejemplo a seguir para hacer presente a Jesús en nuestras vidas, todos los días", dice, con la esperanza de dar a conocer mejor a la nueva santa a su regreso a Argentina.
Carmen, que vino de México con su hermana, su marido y su madre, estaba en Roma por segunda vez para la canonización. "Como católicos, esta canonización es lo más hermoso que podemos vivir, ¡en la basílica del Papa! Es como un sueño hecho realidad". Reconoce que Mama Antula todavía es poco conocida en México, pero espera que esta nueva santa sea honrada en toda América Latina.
El Papa se encuentra con Javier Milei
A la Misa de canonización asistió el nuevo presidente de Argentina, Javier Milei, que ganó las elecciones presidenciales del pasado noviembre tras una agresiva campaña durante la cual hizo varias declaraciones provocadoras sobre el Papa. En una conversación telefónica al día siguiente de su elección, el Papa sorprendió al nuevo presidente invitándole a mostrar más "sabiduría".
Este domingo por la mañana, al final de la Misa, su primer encuentro directo tomó un cariz casi filial, según el relato de la periodista Elisabetta Piqué: "¿Te has cortado el pelo?", preguntó el Papa a este jefe de Estado desaliñado y despeinado. "¿Puedo darle un beso?", respondió el presidente, antes de un cálido abrazo.
¿Podría ser el tono relajado de este primer contacto un primer milagro atribuible a la nueva santa? En cualquier caso, su encuentro, previsto para el lunes, debería servir para conocer más detalles sobre sus posibles convergencias y la posibilidad de un próximo viaje del Papa a Argentina, su tierra natal, que aún no ha visto en casi 11 años de pontificado.