"Es hermoso compartir la fe en Jesús resucitado", dijo el Papa Francisco el 14 de abril de 2024 durante el rezo del Regina Caeli, ante miles de fieles reunidos en la Plaza de San Pedro bajo un sol casi veraniego. El Obispo de Roma se basó en la historia de los discípulos que regresaban de Emaús para invitarnos a volver a centrarnos en lo esencial y a orientar nuestras comunicaciones hacia noticias "positivas y constructivas".
"Cada día nos bombardean con mil mensajes", dijo Francisco. "Muchos de ellos son superficiales e inútiles, otros revelan una curiosidad indiscreta o, peor aún, nacen del chisme y de la malicia", lamentó, señalando que se trata de "noticias que no sirven para nada, que incluso hacen daño".
Por el contrario, el Papa instó a "compartir las realidades que, para bien o para mal, han tocado nuestras vidas, para poder ayudar a los demás", subrayó.
"Cada uno de nosotros ha encontrado al Señor, pero nos cuesta hablar de ello", reconoció el Papa. Invitó a "dar testimonio de los momentos en los que percibimos al Señor vivo y cercano, que encendió la alegría en nuestro corazón o enjugó nuestras lágrimas, que nos transmitió confianza y consuelo, fuerza y entusiasmo, o perdón, ternura y paz", detalló.
El Pontífice argentino invitó a los cristianos a recordar "los esfuerzos y el trabajo que hacemos para comprender y progresar en la vida de fe, tal vez incluso para arrepentirnos y volver sobre nuestros pasos", insistió.
"Si hacemos esto, Jesús, como hizo con los discípulos en la tarde de Pascua, nos sorprenderá y hará aún más bellos nuestros encuentros y nuestros ambientes", aseguró a la multitud al final de esta breve meditación, invitándoles a guardar un momento de silencio para meditar sobre este recuerdo del encuentro con Cristo.