El Papa Francisco celebró la Misa de la primera Jornada Mundial de la Infancia, el 26 de mayo de 2024. En una homilía sin notas, habló a los 50 mil niños fieles reunidos en la Plaza de San Pedro sobre la "Trinidad" y la necesidad de paz en el mundo. El actor y cineasta Roberto Benigni concluyó con una larga arenga en la que instó a los niños a creer en sus sueños y diseñar el mundo del mañana.
El Papa Francisco apareció en la Plaza de San Pedro en plena forma y con una sonrisa en la cara para celebrar el primer Día Mundial de la Infancia. El día anterior, el Pontífice argentino había pasado la tarde en el estadio Olímpico de Roma con unos 50 mil niños en un ambiente festivo.
Este domingo, bajo el sol veraniego, abandonó el texto de su sermón para dirigirse directamente a los niños en una homilía espontánea de preguntas y respuestas sobre la "Trinidad".
El Padre que nos ha creado, Jesús que nos ha salvado y el Espíritu Santo que nos acompaña en la vida"
"El Padre que nos ha creado, Jesús que nos ha salvado y el Espíritu Santo que nos acompaña en la vida", resumió el Papa Francisco a Dios, haciendo que los niños repitieran muchas veces este catecismo condensado.
Para concluir su breve homilía, el Papa argentino pidió a los niños que recen por sus padres, abuelos y niños enfermos. "Y sobre todo, recen por la paz", insistió.
Giorgia Meloni y el espectáculo de Benigni
Frente a la plaza de San Pedro se encontraban la jefa del Gobierno italiano, Giorgia Meloni -que se reunió brevemente con el Papa antes de la Misa- y el alcalde de Roma, Roberto Gualtieri. Tras la Misa y el rezo de la oración mariana del Ángelus, el Papa Francisco escuchó un monólogo de Roberto Benigni, ganador del Oscar al mejor actor y a la mejor película de habla no inglesa por su filme "La vida es bella" en 1999.
"¿A quién le gustaría ser Papa? Que levante la mano", dijo el artista italiano de 71 años durante su actuación, que duró casi 25 minutos. "¡Santidad, hay veinte, treinta! Tenemos que ampliar el Vaticano!", se rió, volviéndose hacia un sonriente Papa Francisco.
"En el reino de Dios, todo es posible", continuó Roberto Benigni, asegurando que entre los niños presentes en la Plaza de San Pedro podría estar el próximo Papa. En un no parar de palabras, el actor instó a los niños a crear e inventar el mundo del mañana.
"Cada uno de vosotros es un héroe, el protagonista de una historia única […] Amad lo que hacéis. No os limitéis a hacer un buen trabajo […] No tengáis miedo […] Leed todo lo que podáis […] No esperéis que el mundo se ocupe de vosotros, sino ocupaos del mundo […]". Y concluyó implorando a los niños que encuentren las palabras que pongan fin a la guerra.
La Jornada Mundial de la Infancia es una iniciativa del Papa Francisco, lanzada el 8 de diciembre. El evento se inspira en el modelo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), establecida por el Papa Juan Pablo II en 1985 para jóvenes adultos de entre 18 y 35 años. Esta primera edición reunió el sábado a 50 mil niños -la mayoría italianos- en el estadio Olímpico de Roma.