El domingo pasado se llevó a cabo una peregrinación masculina en Brasil que reunió a más de 80 mil hombres que rezaron el rosario. Este fenómeno único, que cada año atrae a más participantes, es una prueba de la vitalidad y profundidad de la fe mariana en el corazón de los hombres brasileños.
Rosario de hombres
El origen de la peregrinación se remonta a 1936, cuando en la ciudad de Itabi, en el estado de Sergipe, el capuchino P. Peregrino animó a los hombres a rezar juntos el rosario. Lo que comenzó como una iniciativa local se convirtió, con el paso del tiempo y el crecimiento gradual, en un movimiento nacional llamado Rosario de los Hombres, en el que participan más de un millón de hombres de todo Brasil. Apoyado por el episcopado brasileño y bajo el liderazgo del Arzobispo Gil Antônio Moreira, el movimiento se está convirtiendo en un fuerte testimonio de la espiritualidad masculina y de su compromiso con la vida de la Iglesia.
La peregrinación de este año se celebró bajo el lema "Rosario de Hombres: celebrando la Palabra de Dios en la Casa de la Madre", con el lema tomado del salmo "Tu Palabra es una luz en mi camino" (Sal 119).
Durante la peregrinación no solo se rezo el rosario, sino que los hombres de todo Brasil tuvieron una adoración nocturna al Santísimo Sacramento, misas, conferencias ascéticas, procesiones y la posibilidad de recibir el sacramento de la penitencia. Debido al elevado número de participantes, la mayoría rezó fuera de la basílica, con capacidad para 30 mil personas.
Peregrinación de hombres
La reunión de un número tan elevado de hombres en Aparecida, dispuestos a rezar juntos y a dar testimonio de su fe, no es solo una expresión de unidad espiritual, sino también un recordatorio del papel que el rezo del rosario y la confianza en Nuestra Señora desempeñan en la vida de todo cristiano.