San José Sánchez del Río, un joven mártir de la Guerra Cristera en México, decidió unirse a los cristeros para defender la fe en tiempos muy complicados e inestables. Él sabía que eso podía costarle la vida, sin embargo, alegre, estaba dispuesto a morir por Cristo.
Sus padres intentaron disuadirlo y él contestó que "nunca había sido tan fácil ganarse el Cielo" y concluyó con un contundente: "y no quiero perder la ocasión".
Pero, ¿fácil?
¿Fácil para él que dejo su casa, su familia y fue a la guerra? ¿Fácil para sus padres, que vieron marchar a sus hijos sin saber si los volverían a ver con vida?
Este testimonio solo se entiende a la luz de la fe, el amor y la firme convicción.
Te invitamos a conocer su vida.