Desde México viajaron 25 mil peregrinos de 100 diócesis diferentes para participar en Lisboa. Estos jóvenes, que durante mucho tiempo estuvieron ahorrando para poder cumplir su sueño de estar cerca del Papa Francisco, están viviendo una experiencia única en este encuentro mundial de la JMJ. Aleteia México se dio a la tarea de entrevistar a algunos de estos jóvenes y esto es lo que nos han compartido desde Lisboa.
Juanis Rubio, Celaya
«Mi impresión de la Jornada, hasta hoy, es que a pesar de la pandemia y las adversidades, y de que muchos quieren opacar este momento de encuentro, los jóvenes manifiestan su fe por las calles con un grito de esperanza para que la iglesia continúe. Es una emoción inmensa que Dios me permite vivir, a mí y a muchos de los jóvenes de la provincia Bajío aquí presentes. Son un ejemplo de esa fortaleza y manifestación de fe».
Este fue el ambiente que se vivió al momento en que los jóvenes en Lisboa vieron de cerca al Papa Francisco, cuando recorrió el lugar en su papamóvil. Los jóvenes mexicanos, con sus banderas y sombreros, le dieron una cálida bienvenida.
"Estamos muy emotivos por todo lo que ha dicho el Papa Francisco; el escucharlo aunque sea de lejos es una gracia que nos llena".
Víctor Santana, Guadalajara
"Estar entre tantos jóvenes que hablan en diferentes idiomas, pero que nos podemos entender por que vivimos lo mismo, y poder llevar el estandarte de la Virgen María de Guadalupe hasta Europa nos ha hecho sentir acompañados".
Padre Crisanto Rico, Celaya
"Mi experiencia más bonita (hasta hoy) ha sido contemplar a los los jóvenes de diferentes países unidos por la misma fe. Se siente la acción del Espíritu Santo que une la diversidad de las lenguas en la confesión de una misma fe. Se percibe el amor a Jesús y la Iglesia. Una en comunión con el Papa. Sin duda es una experiencia de fe".
Marcos de la Cruz, Guadalajara
"Lo más bonito que he vivido en esta JMJ 2023 es el darme cuenta, en carne propia, de que la Iglesia está más viva que nunca, y que la juventud está más presente que lo que yo pensaba. También el darme cuenta que todos somos parte de la misma familia, sin importar las diferencias culturales y de idioma".
Chuy Bravo, Guadalajara
"Lo mejor ha sido la unión de jóvenes de tantas naciones unidos por Cristo. Ver que no es necesaria más alegría que la que da saberse amado e hijo de Dios para estar pleno".
Lisboa de verde, blanco y rojo:
Pakistán, España, Angola... verdaderamente una Iglesia universal
Así como los mexicanos han compartido sus historias con Aleteia, existen otros jóvenes que están compartiendo sus testimonios de fe y esperanza. Conoce sus historias, ¡somos parte de la misma Iglesia!